Alba Olmedo y Nano de Marbella proponen un flamenco puro, vivo y ameno en el que la fuerza, arraigo y sobriedad van de la mano de la distensión y la alegría.
Alba Olmedo y Nano de Marbella proponen un flamenco puro, vivo y ameno en el que la fuerza, arraigo y sobriedad van de la mano de la distensión y la alegría.